Los millones de electores en Argentina aspiran a que su candidato ganador Alberto Fernández saque al país de ese marasmo económico en el que se encuentra empantanado. Desde el principio de campaña los sondeos electorales daban como claro ganador al candidato peronista populista y a su compañera C. Kishner. El binomio como buen populista ha prometido un “milagro” para levantar a una Argentina sufrida por su dura crisis económico-social “Vamos a construir la Argentina igualitaria y solidaria que hemos soñado”, es decir no ofrecen nada nuevo en su discurso.
Lamentablemente para las aspiraciones de Macri y sus electores su gestión económica le ha pasado factura: la pobreza ha aumentado en el país, algo que Macri había prometido eliminar en su campaña de 2015 : el 35% de los argentinos viven bajo limite de pobreza (2 usd. X dia); 50% de niños sufren de pésima alimentación; el desempleo es el más alto desde el 2006;; la inflación se dispara, el sector alimentación es el más afectado con 55% anual, tomar leche ha llegado a ser un lujo y una barra de pan vale más de 100 pesos (1,40 usd.).
De otro lado además, las finanzas del Estado en situación lamentable: el ‘gasto corriente’ del estado ha sido financiado con emisión de deuda en dólares, lo que ha comprometido el presupuesto nacional con el aumento de la tasa de interés que se volvió insostenible, por lo que ha debido intervenir el FMI con fuertes medidas de austeridad, como de costumbre, esto ha producido una fuerte depresión económica, a lo que los argentinos le han han denominado ‘Macrisis’.
Para quienes pensaban que la presencia de Cristina iba a ser negativa para la campaña populista, no fue así, a pesar que Cristina Kishner es investigada por 3 affaires de corrupción lo que produce un rechazo de buena parte de la población, los resultados muestran que no. La estrategia fue postularse no como presidenta sino como segunda en el binomio. Pero por otro también, las bases peronistas de Cristina dieron un apoyo decisivo a Fernandez lo que lo puso desde el principio como uno de los favoritos. En términos de marketing político C. Kishner no ha tenido apariciones recurrentes en la campaña, más bien ha sido bastante discreta para no dañar la imagen de Fernandez, esto le permitió manejar su campaña con más autonomía y desplegar una imagen ‘aparentemente’ no comprometida con la deteriorada de C. Kishner.
El problema es que en el contexto de crisis económica y social rampante… Cómo el populista Fernandez y su fórmula C. Kishner sacarán de la pobreza y desempleo a millones en conrto plazo ? Cómo reducir esa hiperinflación? Cómo restaurar las finanzas del Estado sin sacrificar los intereses económicos de la población? Desde ya A. Fernandez ha debido admitir que respetará los acuerdos y compromisos de deuda con el FMI y otros acreedores internacionales, con la intención también de renegociar la deuda. Justamente para eso deberá mantener buenas relaciones con Washington el mayor influyente del FMI, lo que es poco probable conociendo la determinación de D. Trump respecto de administraciones socialistas en el hemisferio…
El giro a la izquierda de Argentina va a producir serios problemas a nivel regional. Desde ya Bolsonaro ha anunciado (amenazado) que se retirará del MercoSur si Fernandez llega al poder y comienza con políticas proteccionistas, así como promete de no dejar entrar olas migratorias hacia la frontera que produciría las políticas económicas del chavismo kishnerista argentino.
Encontrar a corto plazo crecimiento económico en una situación como esta es imposible, pero así como la gestión de la economía fue escrutada en estas elecciones, la gestión económica populista de izquierda va a ser también escrutada de manera severa tan pronto las políticas se implementen… El mismo Fernandez ha declarado ya que “Los tiempos que vienen no van a ser fáciles”. Entonces todos los argentinos se darán cuenta de que los "milagros económicos no existen" Calentarán pronto las calles ?
Dr. Dario Cervantes P.
